Se dictan normas sobre la operación y funcionamiento de establecimientos que explotan el uso de videojuegos, se busca principalmente proteger a los menores de 14 años de edad, para ello, se limita su acceso a cada clase de juego, de acuerdo con una clasificación previa, de acuerdo al grado de agresividad soportable y/o diferenciable por rango de edades. Esta iniciativa define claramente a los establecimientos que serán regulados y los criterios bajo los cuales deberán funcionar, entre ellas: La distancia de operación respecto de un Centro Educativo, prohibición de ingreso para menores de 14 años, condiciones de espacio, luz, medidas de atención y prevención de emergencias, prohibición de ingreso de bebidas embriagantes, cigarrillos, entre otros.