Se autoriza al Banco de la República para suscribir acciones del Banco de Pagos Internacionales y realizar los aportes correspondientes de acuerdo con los estatutos de este último, recursos provenientes de las reservas internacionales. El Banco de Pagos Internacionales tiene origen en el Plan Young (1930). Aunque inicialmente el Banco de Pagos Internacionales fue creado para efectos del pago de las reparaciones a cargo de Alemania, desde su creación se contempló que el mismo tendría un papel de mayor alcance, por cuanto se previó que su objeto era promover la cooperación de bancos centrales, proveer facilidades para las operaciones financieras internacionales y actuar como fiduciario o agente en relación con los pagos financieros internacionales. Los beneficios primordiales en la incorporación del Banco de la República al Banco de Pagos Internacionales está la de un mayor reconocimiento y de la presencia de Colombia en la Comunidad Financiera Internacional; contribuye a una mejor inserción de la economía colombiana en la Mundial; Conduce a una mayor conexión y cooperación del Banco de la República y los principales bancos centrales del mundo; Permite el acceso a foros de alto nivel en los cuales se discuten políticas económicas y financieras mundiales; Facilita a las autoridades económicas el análisis de los mercados internacionales y de las iniciativas para preservar la estabilidad financiera.